Las contraseñas más usadas en 2021 son las menos seguras según revela un informe de ESET, compañía de ciberseguridad.
¿Puede existir algo tan tedioso como pensar en una para nuestras cuentas? Seguramente sí lo haya, pero ese no es el caso ahora. Las contraseñas impiden que agentes externos puedan entrar en lugares tan importantes como cuentas bancarias, redes sociales, etc. Por desgracia, la seguridad de las contraseñas ha ido en descenso conforme ha aumentado la sofisticación de los ciberataques y, aunque hay otras formas de protección, muchos usuarios siguen apostando por lo más básico que existe. Ahora bien, ¿Qué es lo básico? Fecha de nacimiento, nombre (mascota, el propio, persona querida, etc.) o incluso algo tan simple como 12345674890. Evidentemente, esto no son contraseñas seguras, algo que podemos ver en un informe de ESET, compañía líder en detección proactiva de amenazas. A pesar de las reiteradas advertencias, se siguen usando contraseñas de baja o nula seguridad. Las contraseñas más usadas en 2021 son las menos seguras.
2021 ha sido un año malo para la ciberseguridad en muchos aspectos, y uno de ellos ha sido el relacionado con las contraseñas. Este año, como en anteriores, se sigue cometiendo el error de usar configuraciones muy vistas ya, tales como: 123456, 123456789 o 12345. De hecho, según ha revelado la propia ESET, estas han sido la primera, segunda y tercera contraseña más usada respectivamente. Ocho de las diez contraseñas más usadas están compuestas por combinaciones numéricas, siendo las ya mencionadas las que más se repiten. Fáciles de recordar, este tipo de contraseñas no requieren hacer memoria, pero claro tiene un efecto negativo y es que es muy sencilla de vulnerar. El problema se agrava exponencialmente si usamos esta contraseña para todo. La tónica sigue siendo la misma desde 2017, sin variar un ápice, sobre todo en la más usada. De nuevo, seguimos cayendo en el mismo error.
Medidas adicionales para mejorar la seguridad
El uso de las contraseñas tradicionales seguirá estando vigente durante mucho tiempo, aunque desde hace tiempo hay otras opciones. La más popular es el uso del factor de doble autenticación, gracias a la cual podemos mejorar la seguridad de la cuenta de forma exponencial. Si apostamos por tecnología física, la biometría se está expandiendo mucho, sobre todo en dispositivos tipo smartphone. El reconocimiento facial o dactilar son muy populares últimamente, y es lógico pensar que se expandirán en el futuro a más ámbitos que, por ejemplo, solo el empresarial. De momento, para el usuario de a pie se recomienda usar el ya mencionado factor de doble autenticación así como crear contraseñas más complejas. La combinación de letra, número y signos, aunque complicada de recordar, es una de las mejores opciones. Además, se recomienda cambiar cada cierto de contraseña para evitar posibles problemas. Invertir unos minutos nos evitará dolores de cabeza.
Fuente: https://cybersecuritynews.es/las-contrasenas-mas-usadas-en-2021-son-las-menos-seguras/